Camas para perros higiénicas – Limpias a nivel médico, frescas a la vista

Por qué la temperatura de lavado marca la diferencia

La cama o superficie de descanso de tu perro acumula cada día pelos, escamas cutáneas y sebo natural del pelaje. Esa combinación crea el ambiente ideal para bacterias, hongos, ácaros y parásitos. Lavarla con regularidad no solo mantiene la limpieza: también protege la salud de tu perro y garantiza un hogar realmente higiénico para ambos.

De un vistazo:

• 60 °C – higiene eficaz en el día a día contra ácaros, hongos y bacterias.
• 95 °C – limpieza profunda con nivel médico para la máxima seguridad.
• Lavable en su totalidad – limpieza higiénica incluso en el relleno.

Por qué lavar a 95 °C marca la diferencia

La mayoría de las camas para perros del mercado solo se pueden lavar a 30 °C o 40 °C, temperaturas que no eliminan los gérmenes, hongos ni parásitos que se alojan en profundidad. Incluso los 60 °C pueden ser insuficientes: bacterias resistentes como Staphylococcus aureus o hongos formadores de esporas como Trichophyton sobreviven a estos ciclos. Solo el lavado a hasta 95 °C destruye por completo estos microorganismos y garantiza una higiene segura sin productos químicos agresivos.

En Doctor Bark, todas las camas y cojines RedLabel están diseñados para soportar estas altas temperaturas, alcanzando un nivel de limpieza que incluso recomiendan los veterinarios: higiene profunda, duradera y certificada.

Sebo – el verdadero caldo de cultivo para gérmenes y olores

El sebo natural del pelaje de tu perro es una de las principales causas de los olores y del crecimiento microbiano. Con el uso diario, este se introduce profundamente en el tejido, donde bacterias y hongos lipófilos encuentran las condiciones ideales para multiplicarse. Hongos como Malassezia prosperan especialmente en este entorno graso. Solo las altas temperaturas de lavado (60–95 °C) eliminan por completo estas combinaciones de grasa y proteína, eliminando así el origen de los gérmenes y los malos olores.

Lavable en su totalidad – higiene hasta el núcleo

La mayoría de las camas para perros solo se pueden lavar superficialmente: la funda se retira, pero el interior permanece sin limpiar. Sin embargo, es precisamente en el relleno y las costuras donde se desarrollan y multiplican los microorganismos y parásitos.

La humedad, el sebo y el calor penetran en profundidad, creando un entorno perfecto para ácaros, esporas y bacterias. Cuando solo se lava la funda a 30 °C o 40 °C, la fuente real de contaminación permanece intacta: la cama vuelve a oler pronto y la carga microbiana sigue presente.

Las camas y cojines Doctor Bark son completamente lavables en su totalidad: la funda, el relleno y las costuras se enjuagan y desinfectan térmicamente por completo. De este modo, se eliminan bacterias, hongos y parásitos incluso en las capas más profundas. El resultado: limpieza médica – visible, palpable y sin olores.

95 °C – limpieza con nivel médico

Solo a temperaturas cercanas a la ebullición se destruyen completamente los gérmenes, hongos y parásitos. En la práctica, esto significa:

• Staphylococcus aureus y Acinetobacter sobreviven a lavados a 60 °C, pero se eliminan completamente a 90–95 °C.
• Hongos formadores de esporas (como Trichophyton) solo se desactivan por completo a temperaturas cercanas a los 95 °C.
• Biofilms y residuos grasos se disuelven únicamente a 95 °C – los gérmenes pierden su entorno protector.

Con la línea RedLabel, Doctor Bark ofrece a los propietarios de perros el máximo nivel de higiene disponible: ideal para perros alérgicos, animales sensibles o hogares con niños. Una cama que no solo parece limpia – sino que lo está de verdad.

Guía de elección:

• 60 °C – higiene eficaz para el uso diario y la limpieza regular.
• 95 °C – limpieza profunda con nivel médico para la máxima seguridad.
• Lavable en su totalidad – limpia el relleno y las costuras, donde realmente crecen los gérmenes.
• Eliminación del sebo – se elimina el caldo de cultivo de gérmenes y olores.

Sin productos químicos agresivos

Doctor Bark confía en la acción mecánica y la temperatura, no en productos químicos agresivos. Así se protege la piel, las vías respiratorias y el medio ambiente, manteniendo la calidad y la durabilidad de cada producto.

Después de cada lavado, la superficie de descanso de tu perro queda limpia y fresca – como el primer día.

Life is Bark.